Refranes de mi Abuela

Refranes que contienen la palabra "madre"

Al lobato, mastín y al cano, rayano. (Localidad: Es un refrán que Hipólita de Montijo de 77 años oía de su abuela y a su madre. Quiere decir que para ahuyentar a un lobo joven lobato, cualquier mastín puede hacerlo. Ahora si el lobo ya es viejo y sabio [los lobos adultos suelen ser más claros o canos, por la edad], sólo se podrá enfrentar a él un mastín rayano, casta de perros en peligro de extinción, muy valientes, fuertes y de pelo más largo, procedentes de la zona fronteriza entre Extremadura y Portugal denominada la raya. En la actualidad es común utilizar sólo la parte final del refrán: “Al cano rayano” y esto se hace cuando alguien intenta hacer algo para lo que no está cualificado y le sale mal, por ejemplo: si mi hijo intenta arreglar la lavadora y la estropea más, se le diría: "Al cano rayano", el significado sería parecido al de "Zapatero a tus zapatos". Hipólita sólo lo ha escuchado en los pueblos de La comarca de Las Vegas Bajas del Guadiana y siempre a gente mayor. Su abuela tenía una versión parecida que era: "Al bucho mansetín y al calvo mansetín rayano". El bucho se refiere a lobucho y mansetín es un localismo arcaico de la provincia de Badajoz para denominar al mastín. También existe el mismo refrán en el valle de Jálama, pero en su lengua propia a fala.)
Al niño besa quien besar a la madre quisiera.
Allí está la madre del cordero.
Amor de madre, es incomparable.
Amor de madre, ni la nieve lo deshace.
Amor de madre, ni la nieve lo hace enfriarse.
Amor de madre, que todo lo demás es aire.
Antes miente la madre al hijo que el hielo al granizo.
Aunque la ambición en si es un vicio, es a menudo también la madre de la virtud.
Azote de madre, ni rompe hueso ni saca sangre.
Besando al niño, a su madre le hace un cariño.
Buena vida, padre y madre olvida.
Caracol saca los cuernos al sol que tu padre y tu madre ya los sacó.
Casa sin madre, río sin cauce.
Como es la madre es la chiquilla.
Conquistada la madre, segura está la hija.
Da los cumplidos en alta voz y los reproches despacio. (Ruso - me lo decía mi madre)
De buena vid planta la viña y de buena madre, la hija.
De la madre la gran ciencia, es tener mucha paciencia.
De mujer que es madre, nadie nunca mal hable.
De que la madre es de paso, la hija hasta el cincho azota.
Dende el vientre de mi madre vine a este mundo a cantar. (Martín Fiero - línea 35)
Diablo te hiciste, porque padre no tuviste y madre no temiste.
Diligencia es madre de la industria.
Dos hijas y una madre, tres diablos para un padre.
El hombre necio, menosprecia a su madre.
El padre para castigar y la madre para tapar.
El pollo de enero, sube a su madre al gallinero.
El que no quiere a su madre, no quiere a nadie.
Esa es la madre del cordero.
Ese cree que San Pedro es la madre de Dios, porque usa camisola.
¡Está de madre!
Faltara la madre al hijo, pero no la niebla al granizo.
Hijo de ruin padre, apellida a su madre.
Hijo que sale al padre, saca de duda a la madre.
Hijo sin dolor, madre sin amor.
La amante ama un día, la madre toda la vida.
La deleitosa vida, padre y madre olvida.
La diligencia es madre de la buena ventura, y la pereza (su contraria) jamás llegó al término que pide un buen deseo.
La experiencia es la madre de la ciencia. (Quien lee, sabe mucho, pero quien observa sabe todavía más)
La hija, paridera; la madre, cobertera.
La ignorancia es la madre de la felicidad.
La ignorancia es la madre de todos los vicios.
La madre no comió carne; el padre no bebió vino; y salió sietemesino.
La madre y el delantal, tapan mucho mal.
La madre y la hija, por dar y tomar son amigas.
La madre y la hija, usan la misma camisa: la de la madre y no la de la hija.
La mesa pobre es madre de la salud rica.
La necesidad es la madre de todas las invenciones.
La ocasión es madre de la tentación.
La ociosidad es madre de todos los vicios.
La pereza es la madre de la pobreza.
La tierra donde me criare, démela Dios por madre.
Llorara la madre al hijo, más que la nieve al granizo.
Madrastra, madre áspera.
Madre boba tuviste si al mes no te reíste.
Madre, casadme, aunque sea con un fraile.
Madre, casarme quiero, que ya llego el candelero.
Madre dispuesta, hija vaga.
Madre e hija, caben en una camisa; suegra y nuera, ni dentro ni fuera.
Madre e hija caben en una camisa; suegra y nuera, ni en una talega.
Madre hay una sola.
Madre holgazana cría hija cortesana.
Madre, marido quiero, que dormir sola me da miedo.
Madre muerta, casa deshecha.
Madre no viste, padre no tuviste, diablo te hiciste.
Madre pía, daño cría.
Madre piadosa hace hija asquerosa.
Madre que consiente, engorda una serpiente.
Madre, ¿qué cosa es casar? Hija: hilar, parir y llorar.
Madre que no cría, no es madre, sino tía.
Madre quiero ser, e hijos tener.
Madre vieja y camisa rota no es deshonra.
Mañana de niebla, tarde de paseo. (Me lo decía mi madre cuando era pequeño y me quejaba de la niebla)
Ni tengo padre ni madre, ni perro que me ladre.
Oveja duenda, mama a su madre y a la ajena.
P'a su madre!
Padre no tuviste, madre no temiste; hijo, diablo te hiciste.
¡Qua madre!
Quien no tenga pan para mayo, ni hierba para abril, no le habría su madre de parir.
Quien tiene madre, muérasele tarde.
Si el hijo sale al padre, de dudas saca a la madre.
Si quieres ser feliz por un momento, la venganza es tu amuleto, si quieres ser feliz toda tu vida, perdona y olvida (La madre de Alejandro siempre se lo decía cuando le comentaba lo que pasaba por su vida... Alejandro siguió su consejo y ha sido feliz toda su vida. )
Solo la madre entiende a sus hijos.
Tres hijas y una madre, cuatro diablos para un padre.
Una madre es para cien hijos y cien hijos no son para una madre.
Una madre y una hija caben en una botija, una suegra y una nuera se estorban en una era.
Una mentira, madre es de cien hijas.
Vieja verde caprichosa, ni fue buena madre ni buena esposa.

Refranes encontrados: 89